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Lietor

Lugares de interés

Liétor Natural.

Desde los miradores y la reciente pasarela del Pilancón, situados a 100 m. sobre el valle del río Mundo, nos ofrece una espectacular vista del paisaje característico de la Sierra del Segura. La abundantes fuentes y sus manantiales riegan la rica huerta de origen andalusí.

La suavidad del clima que nos ofrece el valle, permite la existencia de una variada flora predominando el pino, atocha, retama, enebro, encina y gran variedad de plantas medicinales, romero, tomillo, espliego, salvia, ajedrea, etc.

Las garzas, nutrias, jabali, cabra montés, junto con el Águila Imperial, la Real y la Perdicera, cernícalos, lechuzas, zorzales, etc., en el río las truchas, la carpa y el barbo, son nuestra fauna de esta zona.

Presa del Azud

Como su nombre árabe indica, se trata de una presa sobre el río Mundo, en donde se refleja como un espejo ese agreste enclave de Liétor. Es un paraje que recomendamos para las primeras horas de la mañana, quizás se pueda entonces observar el majestuoso vuelo de alguna garza real o su actividad pescadora en las plácidas orillas del remanso.

Oír la caída tumultuosa de las aguas del mundo al salir del Azud o ver saltar las truchas corriente arriba para superar la amplia rampa del rebosadero, son un verdadero placer.

Peñascal de los Infiernos

Lugar agreste, de rocas ennegrecidas, con innumerables grietas que muestran la evidencia de un lejano cataclismo.

En una de sus covachas fue hallado en 1985 un impresionante ajuar árabe del s. X que ya nos referimos al hablar del museo parroquial.

A los pies del Peñascal discurre el río Mundo entre cañaverales, regando la fértil vega de Dita.

Ermita de Santa Bárbara y vega de Talubia

Ermita de Santa barbara

Es un entorno de belleza singular. Sobre un montículo que se levanta en el centro del valle, está la ermita dedicada a la Santa Mártir abogada contra las tormentas. A sus pies, la presa a la que da nombre y que sirve también de aforo al caudal del río. Aquí, el legendario Mundo describe un amplio meandro antes de entrar a la espaciosa vega de Talubia. Desde la ermita se contemplan las casitas blanqueadas salpicando los feraces y bien cuidados «bancales». Cercan el paraje cadenas montañosas resguardándolo de los vientos fríos, por lo que también se denomina como «la hoya de Talubia».

Los Majales y el Pantano de Talave

Pantano Talave
Talubia termina en «el Chueco» y aquí se estrecha el valle bajo altas rocas y el río se arropa de un arbusto característico de esta zona: «el taraís».

Forman estos, hasta el Talave, auténticas selvas de entrelazados troncos y finísima hoja.

En los majales, las aguas, ya estancadas por el pantano, ofrecen al visitante un sosiego donde «se palpa el silencio» sólo roto por el trino de algún pajarillo o el zambullirse de algún pez. Hasta el muro de contención del Talave (al que se accede por carretera aparte) el caudal se aumenta considerablemente con la aportación de las aguas del río Tajo, trasvasadas aquí por la cuenca del Segura por medio de unas endiabladas y rapidísimas rampas.

pantano

Como en otros pueblos de nuestra comarca, el casco viejo de la villa presenta un trazado de estrechas callejas de indudable tradición morisca donde aún perduran algunos rincones de notable sabor popular.

Vista Panorámica desde los miradores

En la parte de la «Villa» o barrio morisco, tres balcones se asoman al valle, a 100 metros de altura sobre el río. Se contemplan desde ellos las construcciones árabes de feraces huertas aterrazadas.

MUSEO ETNOLÓGICO PARROQUIAL

Todo el pasado histórico, se documenta en las piezas existentes en la Colección-Museo, creada en la Parroquia de Santiago de esta villa, en el año 1972, que se encuentra cronológicamente en tres espacios.

La primera de las salas está dedicada a la arqueología local y nos muestra las extraordinarias piezas del Tesoro de los Infiernos. Otros espacios, dedicados al arte sacro, se inician en el s. VI, con el Ungüentario de la influencia bizantina, y continúan con las colecciones escultóricas y pictóricas junto a documentos desde la conquista de la Villa por la Orden de Santiago en el año 1242.

SALA I (LOS OFICIOS)

En esta nueva sección del museo se muestran tres telares, de los siglos XVIII y XIX, así como diferentes tejidos realizados con ellos.

Esta industria artesanal está documentada en Liétor desde tiempos muy antiguos, y así, en la citada colección de Los Infiernos, encontramos tijeras, un templen de telar y diferentes agujas para pleita.

La industria del esparto como producto autóctono, daba nombre a la «Hispania Espartina» romana, la encontramos representada en un banco de alpargatero, agujas y otros utensilios relacionados con esta fibra y el cáñamo.

SALA II (LA VIVIENDA TRADICIONAL)

LA COCINA

Es el espacio de convivencia familiar en torno al fuego del hogar. De este lugar destacan los elementos de la alfarería popular del siglo XVIII, haciendo notar el paralelismo de estos con la colección islámica denominada «del Corralón».

Ligado a ello la pervivencia en Liétor de una gastronomía autóctona, que destaca por los postres con su exquisita miel.

EL DORMITORIO

Es el lugar íntimo de la casa, en esta zona aparecen las arcas, donde se guardaba lo más valioso, además de la ropa, el catre de cordellete tan citado en testamentos antiguos junto a la cuna del bebé y los elementos de aseo personal, cuyos antecedentes islámicos también se contienen en los ungüentarios y peines de la colección del s. X.

Este recogido espacio era el lugar donde se manifestaba la religiosidad familiar: benditeras, imágenes o cuadros de santo de mayor devoción eran muestra de ello. Toda una religiosidad popular heredada de aquellos «dioses manes» pre-cristianos.

LA CUADRA

Lugar donde se depositaban los variadísimos utensilios relacionados con la agricultura y ganadería, actividades fundamentales en el mundo rural de antaño.

Aquí el paralelismo con los utensilios del ajuar andalusí es palpable: almocafres, azadones, hoces, hachas  y azuelas, trabas, bocados, … y hasta la cartera de miel.

Vemos reflejado aquí una vez más el esparto como fibra más común para la confección de toda clase de recipiente y utensilios.

SALA III (EL CONCEJO)

El concejo es la máxima expresión social y administrativa de la villa e integra durante siglos al individuo con la colectividad.

Tenía múltiples funciones, en relación con los objetos que aquí exponemos, caben destacar la elección de sus componentes mediante el sistema de bombos de encantaramiento y posteriormente urnas electorales para elegir dos alcaldes, uno por el estado noble y otro por el estado llano, el aislamiento de la milicia, con la talla de soldados, vigilancia de las transacciones comerciales para evitar el fraude por medio de las medidas oficiales y del personaje público del «fiel medidor».

Finalmente se muestran armas que eran controladas por los Regidores de la Villa que imponían su autoridad a través de los alguaciles. También confiscaban armas a delincuentes. Así destaca en la colección una navaja del célebre bandolero «El Roche».

Situada en la Plaza Diputación, es un interesante espacio público que rememora los antiguos teatros romanos.

En este espacio se celebran los festejos taurinos de las fiestas de agosto y numerosos actos culturales durante el verano (encuentros de bandas, danzas internacionales, danzas tradicionales, …). 

Paseando por el casco antiguo de nuestro municipio podemos ver las fachadas de antiguas casas blasonadas como la de los Tovarra, Belmonte, Galera o Rodríguez de Escobar, y la fuente del Pilar con sus azulejos de Manises del año 1950 en la plaza mayor, los Lavaderos del Ramblón y Albercones y el Centro Cultural «Candelaria Guirado» del año 1890 de estilo modernista.

Casa señorial de los Rodríguez de Escobar

Situada en la calle Mesón, nº 8 de esta villa.

En el escudo de la fachada se grabó el año 1655, pero sin duda la edificación de la casa es anterior, seguramente de mediados del siglo XVI.

Su linaje.- Miembros de esta familia ya ocupaban puestos concejiles en el siglo XV. Quizás el personaje más destacable fue Antonio Rodríguez de Escobar (licenciado, regidor perpetuo y varias veces alcalde por el estado noble), quien junto con su esposa María Ruiz de Galera fue el gran benefactor del Convento de Carmelitas Descalzos que se fundó en Liétor, al que dejó muchos bienes a comienzos del último cuarto del siglo XVII.

Características de la vivienda.- La planta tiene, prácticamente, forma cuadrada, siendo fábrica de tapial con refuerzos de piedra en parte las esquinas. Los vanos se cierran con sencillas y sólidas rejas de la época. Al traspasar el portón de quicios, se accede a un amplio y sobrio zaguán con techo entablado, desde el que se pasa al patio por un lateral. El patio, amplio es el mayor de todos las casas, es cuadrado y posee galería baja y principal.

La galería superior está sostenida por cuatro esbeltas columnas de piedra de capitel toscano y fuste liso y cilíndrico, sobre las que cabalgan espléndidas zapatas de madera formando ángulo y en las que descargan las grandes vigas maestras, también de madera. Se accede a la galería superior por una escalera que mantiene en su tramo superior los balaustres de madera. La techumbre de este amplio corredor superior se apea en doce zapatas de otros tantos pies derechos de madera de sección cuadrada y aristas achaflanadadas. Es de destacar la puerta que existe en la galería superior de estilo gótico con arco doblemente moldurado en piedra. La portada es el ejemplo más importante de la arquitectura civil en Liétor. Es una pieza de gran equilibrio construida por cuerpo y ático, en cuyo centro están esculpidas las armas de los propietarios.

Original y modificaciones.- La casa conserva básicamente todos sus elementos estructurales originales, aunque pueden verse en el patio unas habitaciones añadidas que deforman la estética del mismo y que impiden ser alguna de las columnas que han quedado empotradas entre los tabiques.

Originalmente el nacimiento de agua que surge en los pies de esta casa (que abastece los caños del Pilar de la Plaza) debió de tener algún broncal en el centro del patio. Actualmente se puede apreciar la capilla en uno de los laterales.

Casa señorial de los Martínez de Galera

Situada en la Plaza del Conde, nº 8 de la villa de Liétor.

Año de construcción.- Aproximadamente la segunda mitad del s. XVI, con posteriores reformas.

Linaje.- Ya en 1487 Juan Martínez de Galera es regidor de Liétor y a partir de esta fecha aparecen numerosas referencias a miembros de este linaje. Se conservan actualmente diversos documentos de la genealogía y pruebas de hidalguía de esta familia, que se exponen en el patio interior de la casa.

En la actualidad pertenece a la familia Guirado quien la compró en 1925 a unos sobrinos de Dª Sacramentos Soto Galera, última descendiente de este linaje en Liétor.

Características.- Edificio de planta cuadrada, centrado en el patio con fábrica de tapial y cimentación de cal y canto. Patio central cuadrado con cuatro columnas cilíndricas de piedra y capiteles jónicos y galería superior con ocho vigas de madera de sección cuadrada con zapatas y mensuales talladas con decoración vegetal.

Escudo sobre puerta de entrada, en piedra, la parte posterior da a levante con vistas a las huertas escalonadas sobre el río Mundo.

Original y modificaciones.- Originalmente el suelo del patio fue empedrado de guijarros, la barandilla superior de madera y la puerta principal, portón con dintel de piedra (actualmente enlucido). La última gran reforma tuvo lugar entre los años 1925 y 1927 y se modernizó el interior (escalera de acceso del patio a la galería superior, azulejos del patio y el resto de las dependencias) y se remodeló la fachada principal (ventanas, balcones, rejas, puerta y fachada), manteniendo intacta la fachada lateral. Recientemente se ha realizado obras de restauración.

Casa señorial de Los Tovarra

Situada en la Plaza del Conde, nº 10 de la villa de Liétor.

Año de construcción.- Aproximadamente mediados del s. XVI y la portada del último cuarto del s. XVII.

Linaje.- Existen diferencias de que entrado el s. XVI, varios Tovarra ocupan cargos concejiles y hacen donaciones y patrocinan obras. En 1575 Gonzalo de Tovarra reconocido como hidalgo, era alcalde y administrador de la Encomienda de Socovos.

Se conserva documentación fechada en 1630 que hace referencia a las raíces nobles de este apellido.

Características.- Edificio de planta cuadrilátera (trapezoidal), con fábrica de tapial, formado por dos cuerpos. El primero es la construcción alrededor del patio, de dos pisos, con habitaciones comunicadas entre sí. El segundo es adosado al edificio anterior por el lado meridional, también de dos pisos pero de mayor altura.

El patio es de planta asimétrica, trapezoidal, con pavimento de la misma roca madre. Tiene columnas de piedra de sección octogonal de creciente, rematadas por zapatas de madera en ángulo. La galería superior está sostenida por ocho pies de madera de sección cuadrada rematados por zapatas. Parte de la barandilla es la original de madera, con dos tipos de balaustres alternados. La puerta de acceso al patio desde el zaguán de entrada es de cuarterones con una cruz de Caravaca grabada.

El portón de acceso es de doble hoja con postigo y herrajes de forja, y está enmarcado por molduras de piedra. Encima se encuentra el blasón de los Tovarra, rematado por un frontón partido coronado por la cruz de la orden de Predicadores, símbolo de la inquisición.

La fachada presenta también bellas rejas de la época.

Original y modificaciones.- Esta casa no ha sufrido grandes remodelaciones salvo las propias de habitabilidad, por lo que en la actualidad se nos presenta en un estado de conservación muy próximo al original.

Una visita obligada es la fuente principal del pueblo o «El Pilar».

Bajo doble balconada de balaustres torneados y frente al Ayuntamiento, se encuentra El Pilar. Es agua de manantial potable, que vierte por dos caños a un pilón o abrevadero.

Todo el conjunto está adornado con azulejos de Manises, con representaciones del Quijote.

Ya en 1579, el informe recibido por Felipe II sobre la villa de Liétor dice textualmente:

«(…) este pueblo es abundoso de agua potable porque tiene muchas fuentes (…) y las que están en el pueblo son: La Rambla y la fuente principal de la Plaza y la Canaleja y los Albercones».

Pilar

 A mediados del S. XIX, Mador la describe como «(…) fuente pública que brota en una casa de la plaza y por tres caños que vierten en un pilón, surte al vecindario, el cual también se provee de otras que igualmente manan en varias casas».

Exposiciones el lavadero

Las dependencias de lo que fue un lavadero público, construido en el año 1950, se ha habilitado, tras su reforma y adaptación, para sala de exposiciones.

Está situado junto al edificio del Exconvento de Carmelitas Descalzos, en la parte baja, junto a la rambla.

iglesia parroquial Santiago apóstol

LA IGLESIA PARROQUIAL DE SANTIAGO APÓSTOL está construida sobre un antiguo templo del que sobrevive su torre que data de la segunda mitad del s. XVIII. De estructura barroca y ornamento neoclásico, el edificio ocupa una superficie de 1.075 m2. Los muros son en su mayoría de cal y piedra sin labrar.

Presenta dos puertas de acceso, la de la fachada principal a la que se accede por amplias escalinatas, aparece con una portada de estilo neoclásico sencillo, con dos pilastras toscanas de piedra que sostienen un entablamento en cuyo tímpano está representada la Cruz de Santiago.

El interior: planta de cruz latina formada por tres naves de cuatro tramos y una serie de capillas que se abren a las naves laterales. Además presenta un, coro alto, situado a los pies de la iglesia donde se encuentra ubicado el Órgano Histórico del s. XVIII.

  • ALTAR DE SANTA RITA.- Retablo construido en 1678, se compone de un sólo cuerpo con sendas columnas salomónicas, adornadas de pámpanos y racimos que apoyan en ménsulas bien trabajadas. La hornacina termina en decorativa tarja y está flanqueada por bandas rematadas por niños atlantes. El ático alberga un crucifijo sobre fondo estrellado y fue dorado en 1795. Este retablo permaneció en el antiguo templo al Patronato y Capilla de Nª Sª del Buen Suceso o Divina Pastora.
  • CAPILLA DEL RESUCITADO. Fue anteriormente la Capilla del Bautismo, cerrada por reja de madera tornada en 1794con una ventana al exterior que hoy es ocupada por el nicho de la imagen. El retablito que la preside es de fina talla decorada con sencillez en azul-verdoso y oro. Construido a finales del s. SVIII, combina lo rococó con elementos neoclásicos. Así dos pilastras sostienen un frontón triangular, cuyos laterales y bajos se decoran con tarjas y riñones asimétricos.

Resucitado

  • CAPILLA DEL ROSARIO. En 1772 se pintó un retablo y sobre esta pintura se colocó posteriormente otro retablo procedente de la ermita de San Antonio de Padua y San Blas, obra de madera tallada y policromada, realizado en 1733 por Blas Crespo. Posee una desproporcionada hornacina limitada por sencillo arquitrabe y estípites girados. La imagen de Nuestra Señora del Rosario, es obra del discípulo carabaqueño de Salcillo, Joseph López del año 1784 y mantiene las vestimentas originales. El ático se resuelve como el cuerpo principal y lo preside un bello cuadro anónimo de María.
  • LA CAPILLA DE LA SOLEDAD. Primitivamente, el frontal de la capilla estaba ornamentado por un retablo fingido con pintura sobre la pared, al modo y estilo de los que figuran en varias capillas. Sobre aquel se colocó a finales de 1795 otro «retablo simulado» en temple sobre madera, obra del maestro milanés Paolo Sistori, a instancias de la Cofradía de la Sangre de Cristo. La imagen de talla para vestir es obra de Roque López, también discípulo de Salcillo.
  • ALTAR DE LA INMACULADA. Retablo barroco de mediados del s. XVII procedente del Convento de Carmelitas Descalzos. En el ático un bello cuadro de Nuestra Señora de la Rosa, y que en los inventarios del Convento la denominaban cariñosamente «la maragata», y en la hornacina una talla de la Inmaculada con peluca natural, obra anónima del s. XIX.
  • RETABLO DE NUESTRA SEÑORA DEL ESPINO. Retablo barroco de 1730, es el retablo más espectacular del templo y se puede incluir en el círculo de la familia Caro de Caravaca. Financiado por el matrimonio formado por D. Juan de Valdelvira Belmonte y Dª Mariana de Tobarra Alcantud, a cuya devoción están realizadas las imágenes de S. Juan y S. José del año 1669 y que ocuparon el retablo de yeserías policromadas sobre el cual se colocó el actual retablo. La imagen de Nuestra Señora del Espino es obra de D. José Sánchez Lozano.

Santismo

ALTAR DE NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN.– Similar al altar de la INMACULADA, proviene también del Convento de lo que fue el altar de S. José (según indica la mesa del altar rococó, decorada en corlado). En el ático aparece un cuadro anónimo representando al Niño de la bola

GRUPO DEL CALVARIO.- Compuesto de un Cristo de pasta madera del s. XIX y dos magníficas obras de Salcillo; la Dolorosa y San Juan Evangelista, este último de talla completa.

ALTAR MAYOR.- Trampantojo, obra del milanés Paolo Sistori del año 1795 es un interesantísimo retablo de perspectiva que en palabras del porpio autor es la obra más particular que he ejecutado. Las imágenes simuladas de S. Juan Crisóstomo y S. Juan Nepomuceno puestos para edificación espirutual de los presbíteros que ocupaban este espacio (presbiterio). En el nicho central Santiago, patrón de España y de este pueblo, talla de la primera mitad del s. XX.

PILA BAUTISMAL.- Es una pila de mármol rojo de una sola pieza. Preside una pintura rococó de mediados del s. XVIII. Enmarcando un Lienzo contemporáneo del Bautismo de Cristo obra de Paquita Sabrafén.

CAPILLA DE LA ESPERANZA.- Imagen de la Virgen para vestir obra de Salcillo. Cuadro anónimo popular de Santo Dominguito de Val y San Pedro Pascual.

CAPILLA DEL PADRE JESÚS.- Retablo barroco del s. XVIII con interesante predela. Imagen de Cristo Nazareno obra de José Sánchez Lozano.

CAPILLA DE SAN JOSÉ.- Retablo neoclásico con mesa rococó, obra del tallista letuario Matías Reolid 1773. Imagen de talla obra de Eusebio Baglietto año 1862

SUBIDA AL CORO.- Antiguos fuelles de tración manual, expuestos para mostrar el sistema que alimentaba al órgano hasta 1959.

ÓRGANO HISTÓRICO.- Construido por el organero Joseph Llopis en el año 1787.

NAVE CENTRAL.- Cuadro anónimo representando a San Jerónimo, traductor de la Biblia Vulgata. Cuadro representando a San Agustín, padre de la Iglesia Latina. Cuadro de un Ecce Homo, anónimo del s. SVII. Cuadro de Cristo con la cruz a cuestas del s. XVII. Cuadro de San Gregorio Magno; Papa que introdujo el canto gregoriano en la iglesia. Cuadro de San Isidro de Sevilla, padre de la Iglesia y autor de las celebres etimologías, obra de A. Lorenzo s. XX.

ALTAR DE SAN CAYETANO.- es el retablo más antiguo de la iglesia, contituído por seis tablas ovaladas del s. XVI. Imagen de talla anónima del s. XVII y XVIII.

ALTAR DE SAN ANTONIO ABAD.- Discreto retablito neoclásico de frontón curvo. Imagen de S. Antonio Abad, talla anónima del s. XVII y XVIII. También se encuentran estandartes de la Orden de Santiago s. XVII.

TORRE EXTERIOR. Obra de sillería terminada en el s. XV, donde trabajaron los canteros Juan de Arana y Locha de Vienda. El campanil luce el escudo de la Orden Santiaguista y la campana más antigua data de 1572.

Dentro de la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol se encuentra el MUSEO PARROQUIAL en el que podemos distinguir las siguientes secciones:

  1. SECCIÓN ARQUEOLOGÍA LOCAL A).- Muestras de la presencia en Liétor de las culturas Neolítica, Ibérica y romana.
  2. SECCIÓN ARQUEOLÓGICA, LOCAL B).- Colección calificada de LOS INFIERNOS y en la que podemos encontrar más de un centenar de piezas de extraordinario valor histórico y etnológico pertenecientes a un ajuar musulmán del s. X, hallados casualmente en una cueva del paraje letuario de los Infiernos (en la actualidad esta colección se encuentra en el Museo Provincial de Albacete).
  3. SECCIÓN ARQUEOLOGÍA LOCAL C).- Colección de cerámica del Corralón. Importante colección de la época almohade letuaria del s. XII, hallada en la calle de los Molinos.
  4. SECCIÓN DE ARTE SACRO A).- Anforita de peltré del s. VII, primera muestra del Cristianismo en Liétor.
  5. SECCIÓN ARTE SACRO B).- Ornamentos sagrados y orfebrería religiosa, a resaltar una Cruz Parroquial firmada por Juan Martínez Simarro en 1659 y una importante reliquia de S. Juan de la Cruz procedente del antiguo convento de Carmelitas Descalzos. Varios ternos y casullas del s. XVII y dos niños de talla de los mismos siglos.
  6. SECCIÓN ARTE SACRO C).- Orfebrería Cálices, patenas, un Cristo de marfil del s. XVII y una custodia de templete del toledano J. Ramírez del sx. XVI.
  7. SECCIÓN ARTE SACRO D).- Tallas en madera de diferentes siglos, destacando una Santa Ana «triple» de finales del s. XVI.
  8. SECCIÓN ARTE SACRO E).- Tallas y documentos, firma del Rey Felipe II, pruebas de limpieza de sangre y un documento de compraventa de una esclava morisca del s. XVI.
  9. COLECCIONES.- Monedas y medallas.
  10. COLECCIONES.- Minerales, fósiles. Reloj del s. XIX.
  11. LIENZOS ANÓNIMOS.- De los s. XVI al XX.
  12. CUADRO DE CRISTO EN AGONÍA.- Anónimo del s. XVII.
La ermita ya aparece mencionada en la Relación de 1579, construida, según una inscripción, a costa de Alonso de Tovarra y su mujer en 1570. La Ermita de Nuestra Señora de Belén tiene planta rectangular muy simple, con arcos de diafragma y cubierta de madera, pero su interés, sobre todo, reside en el gran ciclo pictórico que adorna todos sus rincones con unas muy peculiares pinturas populares, realizadas entre 1734 y 1735. Todo está pintado, retablos, cortinas, arquitecturas ilusorias, en una línea ingenua y colorista dentro de la mejor estética popular. Estilísticamente estos murales están llenos de encantadores arcaismos e imperfecciones, pero es quizá eso lo que le confiere un notable interés. Aquí desfilan santos, santas, escenas, decoración, hasta la alegoría de la muerte, acompañados en ocasiones de sentencias y versos ejemplificadores. Una gran variedad iconográfica ofrece todo el conjunto, de entre todo ello destacamos el Camarín donde ingenuamente se supone que existe una cúpula sostenida por los cuatro evangelistas y rematada por el Espíritu Santo. El frente repite una gran variedad de columnas salomónicas acabadas en altura por una supuesta balaustrada, donde se sientan unos ángeles instrumentistas. Los tres paños del espacio lo ocupan, entre las citadas columnas, una Visitación, La Sagrada Familia y la Inmaculada. Especialmente hermosa por su simplicidad es la primera de las escenas. Otros muchos retablos pintados llenan el espacio interno de la ermita, de los que destacamos el de San Antonio y el de Santa Bárbara. Ermita 075_LA ERMITA DE NUESTRA SEÑORA DE BELÉN.- APROXIMACIÓN HISTÓRICA

Periodo.- Siglo XVII

Estilo artístico.- Barroco
Descripción.-
El Convento de Carmelitas Descalzas, fue fundado en época de Carlos II, a fines del siglo XVII. Es obra enteramente de ladrillo bien concebida y sin duda diseñada por algún fraile de la Orden.

El convento, aunque necesitado de una restauración, destaca principalmente por su claustro, fechado en 1696, con decoración pintada, imitando ladrillo y emblemas alegóricos.

La iglesia, abierta al culto, ofrece una sobria fachada, de las comunes en la arquitectura monástica del barroco del siglo XVII, con sencilla portada de piedra y hornacina flanqueada por escudos carmelitanos pintados y la fecha de 1700; el remate es con frontón triangular y espadaña lateral.

El interior es de cruz latina con cúpula sobre pechinas en el crucero. Es de reseñar en ella las bóvedas con geométrica decoración de estuco. El espacio interno es muy armónico y conseguido.

Es interesante este conjunto, pues mantiene unas formas externas muy simples que son heredadas del sobrio barroco de tradición herreriana y que fue común en la Corte y en Castilla en la primera mitad del siglo XVII; sin embargo aquí, en los últimos años de la centuria, la obra se ofrece con un carácter arcaizante.

En cuanto a la escultura que alberga el templo, destaca, como pieza notabilísima, la imagen titular de la Virgen del Carmen, obra de Francisco de Salzillo, de nobilísima cabeza, que enlaza con las más perfectas realizaciones del artista murciano.

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