Periodo.- Siglo XVII

Estilo artístico.- Barroco
Descripción.-

     El Convento de Carmelitas Descalzas, fue fundado en época de Carlos II, a fines del siglo XVII. Es obra enteramente de ladrillo bien concebida y sin duda diseñada por algún fraile de la Orden.

 

     El convento, aunque necesitado de una restauración, destaca principalmente por su claustro, fechado en 1696, con decoración pintada, imitando ladrillo y emblemas alegóricos.

 

     La iglesia, abierta al culto, ofrece una sobria fachada, de las comunes en la arquitectura monástica del barroco del siglo XVII, con sencilla portada de piedra y hornacina flanqueada por escudos carmelitanos pintados y la fecha de 1700; el remate es con frontón triangular y espadaña lateral.

 

     El interior es de cruz latina con cúpula sobre pechinas en el crucero. Es de reseñar en ella las bóvedas con geométrica decoración de estuco. El espacio interno es muy armónico y conseguido.

 

     Es interesante este conjunto, pues mantiene unas formas externas muy simples que son heredadas del sobrio barroco de tradición herreriana y que fue común en la Corte y en Castilla en la primera mitad del siglo XVII; sin embargo aquí, en los últimos años de la centuria, la obra se ofrece con un carácter arcaizante.

 

     En cuanto a la escultura que alberga el templo, destaca, como pieza notabilísima, la imagen titular de la Virgen del Carmen, obra de Francisco de Salzillo, de nobilísima cabeza, que enlaza con las más perfectas realizaciones del artista murciano.